El nuevo presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, tiene muy claros los objetivos. Los viene repitiendo desde hace tiempo y, con motivo del nombramiento del primer Consell, que dio a conocer ayer, miércoles 19 de julio, quedan manifiestos.
Los valencianos –los españoles en general- quieren menos cargos políticos, menos asesores, menos gasto en políticos. Mazón lo prometió, y ha empezado con el buen pie de cumplir las promesas, con un Consell de 10 miembros, contándole a él. Y ahora falta comprobar la reducción de altos cargos y asesores, que Ximo Puig ha prodigado en estos ocho años de gobierno tripartito de izquierdas.
Mazón es alicantino, donde siempre ha vivido. Es una provincia con casi 2 millones de habitantes. Su economía es muy dinámica. Lo sabe muy bien, pues entre otras cosas fue director gerente de la Cámara de Comercio de Alicante durante 10 años, hasta que llegó al cargo de Presidente de la Diputación de Alicante en 2019.
Ha sufrido estos años el menosprecio hacia el turismo, especialmente por parte de Compromís y Podemos, con el consentimiento de Ximo Puig. Menosprecio que, sin consultar con el sector turístico, llevó a aprobar una tasa turística, que ahora Mazón se ha comprometido a derogar. Es una comunidad autónoma en que el turismo es my importante, y de modo especial en Alicante.
Ahora el sector turístico valenciano respira feliz y contento: la Consellería de Innovación, Comercio y Turismo recae en Nuria Montes, desde 1995 secretaria general de la patronal hotelera y turística Hosbec.
Ha sufrido en estos años diversos enfrentamientos entre el Gobierno valenciano y los empresarios. Valencia dejó pasar la Copa América para ser Barcelona la beneficiada. Tanto la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, como el propio Mazón, ven en la recuperación de la Copa América un objetivo prioritario, y ya se han reunido con el naviero valenciano Vicente Boluda para lograr financiación privada para ese evento.
Tanto Carlos Mazón como la alcaldesa de Valencia quieren potenciar empresarial y turísticamente Valencia y la Comunidad Valenciana, sin sectarismos, creando puestos de trabajo cada vez de más calidad y con repercusión en toda la sociedad valenciana.
Los empresarios valencianos más significativos agradecen este cambio de aires respecto a la etapa anterior. Seguro que Juan Roig y Vicente Boluda agradecen este giro y favorecerán que los empresarios y la Generalitat aúnen esfuerzos.
Carlos Mazón fue director general del Instituto Valencia de la Juventud, nombrado por Eduardo Zaplana, desde 1999. Luego fue director general de Comercio. Como director gerente de la Cámara de Comercio de Alicante durante diez años, destacó como gestor eficaz, buscando crear equipos y alejándose de personalismos.
Conocer su trayectoria explica lo que ahora está poniendo en práctica. Ha nombrado un Consell con las personas que considera más preparadas por su experiencia política o/y profesional.
Con habilidad política ha nombrado a la exportavoz de Ciudadanos en las Cortes Valencianas, Ruth Merino, consellera de Economía, Hacienda y Administración Pública, teniendo en cuenta también su trayectoria profesional en Hacienda, y portavoz del Consell. Un auténtico ‘peso pesado’ y visibilidad de un Consell que quiere ser eficaz, e integrador de otrora votantes de Ciudadanos o de otros partidos políticos… incluidos los que ahora han votado a Vox.
Se llegó a rumorear que Educación correría a cargo de Vox, e incluso se apuntó un nombre concreto: eso equivalía a no conocer a Carlos Mazón, que quiere que el PP protagonice la libertad y la calidad educativa, frente a las protestas educativas frecuentes de estos ocho años pasados. Es una ‘patata caliente’, pero también un ‘bombón’ para ir absorbiendo votantes que, en 2027, posibiliten una mayoría absoluta para el PP en la Comunidad Valenciana.
Y otro tanto sucede con Susana Camarero –Servicios Sociales e Igualdad, área que siempre estaba claro que no dejaría a Vox, socio de gobierno- , el médico Marciano Gómez en Sanidad, y José Antonio Rovira en Educación, área también muy prioritaria para Mazón, para garantizar a los padres la libertad de elección de centro, la defensa del castellano y la no imposición del valenciano. Y Salomé Pradas, consellera de Medio Ambiente. Era evidente que no iba a dejar Igualdad en manos de Vox.
Gobierna con Vox, gracias a un acuerdo muy rápido y hábil: Vicente Barrera, vicepresidente primero y Cultura; José Luis Aguirre, Agricultura; y Elisa Núñez, Justicia e Interior.
Un Consell paritario, otro “guiño” evidente de un Mazón que quiere sumar por todas partes. Es su estilo, ya comprobado en la Diputación de Alicante. Y por ahora está logrando entusiasmo, adhesiones y reconocimiento. Un gobernante sereno, tranquilo, que sabe muy bien hacia dónde va, que cumple lo que promete. Buen comienzo.
Javier Arnal Agustí es Licenciado en Derecho y periodista.
Escribe, también, en su web personal.