Refugiados limpiando barro

El mismo día, sábado 23 de noviembre, “Diario de Teruel” publicaba dos noticias que me sugieren relaciones y reflexiones. 

Por un lado, se publicaba que la Guardia Civil enseña seguridad vial a refugiados alojados en un hotel de Mora de Rubielos ¡durante tres semanas! Un kilómetro del hotel al municipio, a veces de noche, hombres de 25 a 40 años. Sinceramente, pienso que es desproporcionado. Los 110 refugiados de Malí y Senegal llegaron al hotel el 5 de septiembre, con 15 trabajadores de Accem, para apoyarles en su integración.

La otra noticia es la protesta de las trabajadoras de la residencia Jardines de Villafranca de Ebro (Zaragoza), tras el incendio en que fallecieron diez ancianos, para que se mejoren las ratios de esos centros y los salarios. Promesas reiteradas por el Covid-19, e incumplidas. El fiscal investiga ese incendio.

Me preocupó mucho leer la noticia de ese incendio: solo dos trabajadoras para 69 ancianos –el turno de noche- y ayudando la alcaldesa y su marido. ¿Eso es lo previsto para una buena atención ordinaria y emergencias? Esos ancianos son también “refugiados”, no de la guerra ni hambrunas, pero sí de una vida plena de sacrificios y en la fase terminal de su vida. Se merecen todo y dependen de sus cuidadores.

Soy totalmente partidario de acoger a refugiados por una elemental razón solidaria, pero también tenemos otro tipo de “refugiados” en nuestra sociedad, que hay que prestar más atención. Lo diré con más claridad: veo el personal que tienen a su disposición los refugiados en el hotel –el personal del hotel, médico, trabajadora social, etc.– y parece que tienen una mejor atención que los ancianos.

Subrayada mi apuesta por acoger refugiados, hemos de tener cabeza y corazón, para hacerlo bien. Acogerles es integrarles y pedirles algo a cambio, porque las preguntas surgen rápidamente. ¿En qué han invertido su tiempo estos casi tres meses? ¿Han colaborado en alguna tarea de voluntariado local o comarcal? ¿Se les plantea alguna ocupación social por acogerles, para que den algo a cambio, pues no son bebés? La Guardia Civil tiene muchas tareas y dice que faltan guardias civiles en Teruel. 

¿Se ha planteado que los refugiados vayan unas semanas o meses a limpiar el barro en Valencia? Son jóvenes. Han acudido voluntarios de toda España, del extranjero: los refugiados están a 130 kilómetros de Valencia. Los refugiados reciben y deben aportar, ¡máxime ante una devastación como la de la DANA! ¿Y alojar en el hotel de Mora a vulnerables afectados por la DANA, mientras los refugiados limpian el barro y se alojan en alguna escuela, pabellón o alojamiento digno similar?

Hay voluntarios chinos, 200 voluntarios de la comunidad india Sij, inmigrantes hispanoamericanos, africanos que son capaces de ir cantando mientras limpian el barro. Mi pregunta vuelve a ser ¿dónde han estado los refugiados alojados en Mora? Apelo a Accem, al Ministerio, la solidaridad de todos.

  • Javier Arnal Agustí es Licenciado en Derecho y periodista.
    Escribe, también, en su web personal.