Ayer martes se reunieron Rajoy y Sánchez, justo cuando España está en la mitad del largo camino de recuperación de la crisis más grande de los últimos ochenta años, debatiéndose entre la viabilidad de la sociedad del bienestar y las sonrisas socialistas que con tanta eficacia nos arruinan.
La pasada semana nos libramos de una multimillonaria sanción europea por gastar en exceso, los datos de este indulto sintetizan la situación nacional: las administraciones españolas gastan hoy casi 50.000 millones de euros más de lo que ingresan, una cantidad en apariencia astronómica pero que es justo la mitad del agujero público de 100.000 millones anuales que nos legó el socialismo a los españoles en diciembre de 2011.
Hoy estamos justo en la mitad del camino que hemos de recorrer para que el Estado pueda seguir pagando cada mes los dieciocho millones de merecidas prestaciones y salarios públicos que han hecho que hoy España esté en su record histórico de solidaridad. Con sólo dos años más de reformas y crecimiento España estará en niveles óptimos a juicio de la Comisión Europea.
Necesitamos salir del actual bloqueo de Sánchez y Rivera. Pues no es suficiente que nuestra provincia tenga a 7.000 castellonenses más trabajando y cotizando a la Seguridad Social que el pasado año, ni que se batan records de exportación, llegada de turistas o compra de vehículos, la pobreza sigue asentada entre nosotros y urgen nuevas reformas.
Cierto que estamos en el buen camino, los 6.029 parados menos en un año, o el crecimiento de los contratos indefinidos en un 23% así lo acreditan, pero no es suficiente, debemos profundizar en la reforma laboral, del sector público, financiero y fiscal que tan buenos resultados está dando, sólo así nuestras familias afrontarán su futuro con optimismo y nuestros mayores tendrán el sosiego que merecen.