La decisión de invadir la nación soberana de Ucrania por el dirigente soviético, el autócrata y dictador Vladimir Putin, ha provocado una guerra de transcendencia indeterminada por pretender usurpar territorio ucraniano y cambiar su orden político y territorial gobernado por el europeísta Volodomir Zelenski. La invasión de las tropas rusas ha causado destrozos por valor de miles de millones de dólares y el éxodo de varios millones de ciudadanos y centenares de muertos.
En el orden social, Juan Luis Vives en su tratado “De subventione pauperum” (1525) diferencia entre los perseguidos por la guerra y los inmigrantes. Respecto a los primeros, se muestra partidario de que sean acogidos por otras ciudades o naciones a los desplazados de sus lares.
La producción literaria del valenciano Juan Luis Vives en el campo político y de derecho internacional podría tener aplicación al conflicto bélico Rusia versus Ucrania que estamos viviendo actualmente. Su obra en estos aspectos está dirigida a un objetivo fundamental: la consecución de la Paz. Nuestro pensador fue un ferviente pacifista. De ahí que haya sido llamado pacificador europeo y príncipe entre los filósofos defensores de la paz.
Uno de los objetivos esenciales de su copiosa obra -tratados, opúsculos, cartas- era mediar por la paz e influir con los únicos elementos que tenía a su alcance: la pluma y la diplomacia. En sus escritos pasó revista a los problemas políticos, religiosos y conflictos bélicos de Europa, proponiendo siempre la concordia. El pacifismo erasmista de nuestro filósofo aparece en sus afirmaciones.
Vives exhortó a los gobernantes a que pongan un poco de cordura, algo más de atención, una actitud gallarda y generosa para la paz y alentaba a que: “cesemos la matanza, atajemos los saqueos, restablezcamos la concordia, devolvamos a la Humanidad el comercio, la religión, las letras, las artes, la tranquilidad, la seguridad, el contentamiento de la vida", y se interroga: ¿De qué nos sirve la cultura?, ¿de qué la humanidad?, ¿de qué tan numerosas artes que hacen agradable la vida?, si los pueblos son incapaces de lograr la concordia”.
Para la gobernación y avance de los Estados, ninguna guerra será tan próspera como la paz, aunque injusta, si se consideran y examinan ya las zozobras, ya los gastos, ya las disensiones, y sugiere que “ceda el príncipe algún tanto de su derecho antes de que se lo juegue todo”.
Nuestro humanista plasma sus deseos en este campo político-social no sólo en misivas y opúsculos dirigidas a personalidades de la esfera religiosa, política o intelectual, sino también en dos excelentes tratados como son “De concordia et discordia in humano genere” (1529) y en “De pacificatione” (1529), que contienen propuestas concretas pacificadoras y antibelicistas, redactadas con el vigor característico del humanismo cristiano renacentista.
Juan Luis Vives en “De concordia et discordia” expresa sus razonamientos sobre el origen de la concordia y la discordia, los bienes que se derivan de las concordias y los males de las discordias, el camino a seguir para establecer la paz, la onerosa obligación del príncipe de gobernar los hombres, la dignidad y deber del sabio, la grandeza del amor y la exhortación a la caridad, etc.
Su actitud pacifista presenta una excepción. Consideraba que se es pacífico anulando a los enemigos de la paz, incluso si es necesario con el arma de la guerra. Tendría aplicación esa máxima latina que afirma: “Si vis pacem, para bellum”, es decir, “Si quieres la paz, prepara la guerra”. Vives coincide con el filósofo Aristóteles en esta argumentación quien afirmó en su obra llamada “Ética”: “si hacemos la guerra es para vivir en paz” y con el padre Victoria en “Jure belli” al mantener que “el fin de la guerra es la paz y la seguridad de la patria”. Para que sea aceptada, condicionalmente, la guerra debe ser justa en origen, ejecución y término o paz.
En conclusión, podemos aseverar que muchas de las sugerencias y proposiciones del humanista valenciano Juan Luis Vives en este campo político y como pacificador europeo se han proyectado en el mundo de la cultura y en las relaciones internacionales y tienen vigencia actual y podrían aplicarse en la coyuntura bélica que estamos viviendo.
LAS PROVINCIAS. Opinión. Publicado el jueves 31 de marzo de 2022, p. 2
José Vicente Gómez Bayarri es Licenciado en Filosofía y Letras, Doctor en Historia,
Catedrático de Geografía e Historia, Académico de número de la RACV y Medalla de
Plata de la Ciudad de Valencia.