¿"Sumar" o restar?

La izquierda anda revuelta. Hubo un momento en que en el espacio político a la siniestra del PSOE solo había un partido significativo. Poco a poco fueron floreciendo formaciones nacionales o regionales hasta alcanzar cerca de medio centenar quince de las cuales se reunieron el domingo pasado para aplaudir la candidatura de Yolanda Díaz.

¿Que quien es la señora Díaz? Ustedes lo saben de sobra. Es esa señora de mediana edad -51 para ser exactos-, gallega, morena, casada, madre de una hija, descendiente de una dinastía comunista que ella asumió disciplinadamente. Abogada, candidata en varias ocasiones a elecciones regionales con resultados nefastos -cero diputados-.

Con un completo cambio de look, rubia mechada y luciendo los modelos más rutilantes del mundillo político, se traslada a Madrid, accede al Parlamento nacional y en menos que canta un gallo la vemos convertida no solo en miembro de Unidas Podemos sino en Vicepresidenta del gobierno de coalición y sucesora de Iglesias cuando éste hace mutis por el foro.

Pareja de Sánchez en sus paseos por los jardines de la Moncloa y de charlas en el Consejo Ministerial y en los bancos del parlamento (por encima de la Sra Calviño). Nervios Illa en el hablar, incomprensible en sus discursos. Ese es a grandes trazos y con bastante benevolencia el perfil externo de la conocida como “Súper Yoli”.

Veamos lo que más importa, sus posibilidades políticas y las de su partido, “Sumar”, nacido tras militar tres años en UP con una actitud leal hasta el punto que Iglesias la escogió para que dirigiera el cotarro podemita por encima de su ex Irene y de otra destacada radical como Ione Belarra, que debieron quedar bastante fastidiadas.

Visto aquel panorama interno nada acorde con su estilo, Díaz empezó a rastrear las posibilidades de cooperación con otras formaciones como Mas país, Izquierda Unida, los Comunes, los Verdes y muchas más hasta quince que la acompañaron el día 2 cuando hizo su presentación como futura primera presidenta de España.

Estaban allí personalidades importantes como la alcaldesa de Barcelona Colau, el de Valencia Ribó, Garzón, Errejón, Rita Maestre, Mónica García, Fátima Hamed .Pero no estaban ni Irene, ni Ione, ni Pablo ni nadie importante de UP con lo que hay que concluir que se ha certificado una quiebra grave en la izquierda, entre Sumar y UP y eso son muy malas noticias para Sánchez y para todo lo que se mueve a su izquierda.

Las encuestas -todas menos las de quien ya sabemos- dan un PSOE a la baja y con 30 puntos de desventaja respecto al PP. Si a eso añadimos una dispersión de voto en todo su entorno político, el resultado electoral de mayo parece cantado.

Por añadidura, por mucho entusiasmo escénico que mostrara la señora lideresa el domingo pasado, no es previsible que atrape más voto que aquellos que debiliten al PSOE o a UP, no siendo previsible que aquellas arengas decidan a alguien del PP, de Vox o de Cs a probar la aventura de “Sumar” que pronto podría rebautizarse como “Restar”.

Lo bueno de este suspense político es que pronto va a aclararse el misterio. En un mes y medio van a desvelarse cómo funcionan las nuevas formaciones.

Si la izquierda pierde algunos importantes bastiones como Valencia, Castilla La Mancha, Extremadura o Cantabria el final del Sanchísmo será inevitable y lo que estará en juego después de las Generales de fin de año será como se reconstruye una socialdemocracia española que podría sufrir parecido destino que conocieron los fenecidos socialismos francés o griego.

Del futuro del Señor Sánchez creo que ya se está ocupando él mismo.

 

  • Jorge Fuentes Monzonís-Vilallonga es Master en Ciencias Políticas y Económicas y Derecho. 
    Diploma de Altos Estudios Internacionales. Embajador de España en Bulgaria en 1993. 
    Primer Embajador de España en Macedonia en 1995. 
    Embajador de España en Bruselas WEU en 1997, entre otros cargos.