Esperábamos todos que la constitución de un gobierno fuera una magnifica ocasión para alcanzar ese pacto estatal que, sobre educación, ofrecían todos los partidos. MAGNIFICA OCASIÓN, sí!
No creo sea pues un buen principio para ese pacto, la convocatoria de manifestaciones y la paralización de la LOMCE. ¿De verdad creen ustedes, que lo que necesitamos en este país, para mejorar la calidad del actual sistema educativo, es recurrir a la calle y seguir paralizando leyes educativas?
Yo creo, que lo que necesitamos todos es un compromiso de las administraciones a adoptar medidas eficaces para reforzar la libertad y el derecho a la educación y apostar claramente por la mejora de la calidad de nuestro sistema educativo.
Miras altas e ideas claras, es lo que todos necesitamos. Y la primera idea que debemos tener muy clara es que los padres, por derecho natural, son los primeros responsables de la educación de sus hijos. Este es un derecho-deber al que ningún padre quiere ni debe renunciar. Es un derecho que recoge nuestra Constitución en su articulo 27. Si alguien cree que es el Estado el que tiene derecho a educar, habrá que argumentar, negociar y llegar a un consenso ¿no creen?
Una segunda idea, es que la enseñanza privada no es subsidiaria de la pública, ni viceversa. Ambas redes son necesarias y complementarias. No tiene sentido ningún tipo de enfrentamiento. No tiene ningún sentido el eslogan “elige escuela pública”, pues el padre elige un proyecto educativo, que puede encontrar en ambas redes.
Es urgente alcanzar un consenso respecto a una reforma en profundidad de la educación en clave de libertad, excelencia y profesionalidad, superando viejos prejuicios ideológicos que nos han llevado, en parte, al lugar en el que nos encontramos.
Mª Ángeles Bou Escriche es madre de familia, Orientadora Familiar, Lda. en Ciencias Empresariales y profesora