Buenos resultados para el PP en Castellón y provincia, y en la Comunidad Valenciana. Motivo de celebración para Begoña Carrasco, Marta Barrachina y Carlos Mazón. Una geografía teñida de azul, que va en aumento, y marca una tendencia para el futuro.
Es útil recordar lo que se cacareaba hace unos pocos años sobre el fin del bipartidismo PP-PSOE. Nacieron Ciudadanos y Podemos, y ya vemos lo que queda de estos partidos. Habrá que ver lo que sucede con la agrupación “Se Acabó la Fiesta”, de Alvise, que ha obtenido buenos resultados también en nuestras provincias. Alvise se presenta con la bandera de la lucha contra la corrupción y la partitocracia. Sumar, tras la dimisión de Yolanda Díaz, va a desaparecer ¡con un año y medio de vida!
A nivel estatal, Pedro Sánchez ha obtenido unos resultados electorales que le dejan muy vivo, mucho más vivo de lo que en el PP esperaban. Percibíamos que estas elecciones europeas iban a tener un trasfondo nacional como pocas veces anteriormente. Tras las elecciones generales del pasado 23-J, dos cuestiones acaparan la vida española: la amnistía –tras ser negada por Sánchez una y otra vez antes del 23-J– y la imputación de Begoña Sánchez por corrupción y tráfico de influencias. En España hay un voto socialista que, pase lo que pase, no cambia de papeleta, y máxime si se agita el fantasma de que “viene la derecha y la ultraderecha”. ¿Y si condenan a Begoña?
El PP ha ganado en España, es cierto, pero con mucha menos holgura de la que se preveía hace unos meses, y con un margen estrecho al final en las urnas. Ahora le toca trazar su estrategia política. Comparar los resultados del 9-J con los de hace cinco años en las europeas, no es muy útil, porque el panorama político es muy distinto. Ni Sánchez está acabado ni está claro lo que sucedería si hubiera ahora elecciones generales en España, a la vuelta del verano. Sánchez tiene motivos para sonreír.
Feijóo ha ganado, no hay dudas, pero no lo suficiente. No le interesa pedir elecciones anticipadas. ¿Y al conjunto de los españoles? Pienso que las vemos convenientes, pero el panorama es el que hemos visto este domingo, aunque no deben trasladarse plenamente unas europeas a unas generales. Atención: al desaparecer Sumar u con Podemos diluyéndose, esos votos tienen un destino: el PSOE.
Sánchez puede lograr, casi de rebote por el fracaso de Sumar y de Podemos, que una izquierda tradicionalmente muy dividida se una al PSOE… mientras en el centro derecha surge Alvise, que quita votos a PP y Vox. Sánchez sonríe más todavía.
Javier Arnal Agustí es Licenciado en Derecho y periodista.
Escribe, también, en su web personal.