No sólo recibimos mensajes a través de canales tradicionales: Escritura, imágenes, palabras, también nos pueden llegar a través de comportamientos o simples gestos. Algunos son fácilmente interpretables, otros necesitan de una mayor atención e incluso de una especial pericia y no todos somos capaces de desvelar lo que esconden. No interpretarlos adecuadamente, en algunos casos, nos pueden conducir a situaciones comprometidas.
En estas páginas nos adentraremos en la vida de un personaje relevante y poco conocido que, tuvo la habilidad de interpretar uno de esos mensajes encriptados y actuar en consecuencia.
José Fernando de Abascal y Sousa nació en Oviedo en 1743. No fue fácil la vida de Abascal, sus comienzos fueron de penuria y sacrificio. Comenzó su vida laboral a temprana edad, trabajando en una hostería cerca de la Puerta del Sol en Madrid. Tuvo la fortuna de trabar amistad con un reputado militar que frecuentaba el establecimiento. Éste viendo que el zagal era espabilado y dispuesto, le sugirió y ayudó a seguir la carrera de las armas.
El ser Hidalgo, aunque sin fortuna, le permitió acceder como cadete el 27 de junio de 1762 al Regimiento Mallorca, con 19 años.
Su primer destino fue la Escuela de Matemáticas de Barcelona, donde los diferentes cuerpos enviaban a sus cadetes y oficiales, con mayor capacidad, para cursar estudios. En San Roque de Riomieria, pueblo natal de sus abuelos siempre se dijo que: José Fernando tenía la sagacidad de su abuelo Domingo y la capacidad y control de los cuartos de su abuela Ana.
Aunque su hoja de servicios no reflejara acciones especialmente meritorias, hasta 1796 cuando su carrera toma un giro definitivo, hacia el continente americano. En esos primeros años de servicio, no es que disfrutara precisamente de una vida plácida y sedentaria. Estuvo destinado con el regimiento Toledo, en Puerto Rico durante 22 meses e intervino posteriormente en campañas contra: argelinos, portugueses, ingleses y franceses.
Tanto sus cualidades de organización y control como la experiencia adquirida en operaciones terrestres y anfibias van a tener su máximo aprovechamiento, cuando alcance puestos de especial relevancia.
Tras su paso durante tres años por La Habana (1796- 1779) como Teniente del rey (1). La carrera de nuestro protagonista toma impulso definitivo. Al ser nombrado gobernador y comandante militar de Guadalajara, en Nueva Galicia (Nueva España).
Durante los cuatro años como gobernador, el mismo va a describir con minuciosidad, como sofocó una conjura de 30000 indios o llevó a cabo obras de las que se sentían muy satisfecho que iban desde enlucir las viviendas o empedrar calles a construir baños públicos, escuelas, puentes y paseos.
Tras los informes muy favorable elevados por el Virrey de Nueva España Félix Berenguer de Marquina y Fitz Gerald, especialmente, por su comportamiento en la rebelión frustrada de los indios, elogiando: su tacto, inteligencia, amor al Rey y su deseo de lograr el bien público. Es nombrado el 04 de abril de 1804 virrey, gobernador y capitán general de las provincias del Rio de la Plata, sustituyendo a Joaquín del Pino, pero no llegó a tomar posesión del cargo, ya que el barco en el que navegaba, fue capturado por un buque británico, Abascal desconocía que se había declarado un nuevo conflicto entre España e Inglaterra. Fue trasladado como prisionero de palabra -gozaban de libertad bajo palabra- a Lisboa.
Tras recibir el 06 de octubre de 1804 su designación como virrey del Perú, con instrucciones para incorporarse. Inicia un largo periplo que incluyó una dura marcha terrestre de 6500 km. Partiendo de Sacramento se adentró en territorio continental brasileño, para retornar hacia Buenos Aires y desde allí, hacia Lima por el interior.
A lo largo del cual adquiriría el conocimiento de las regiones que atravesó y que no tardaría en serle de gran utilidad.
El 26 de julio 1806 tomó posesión de su cargo en la capital del virreinato.
Desde el primer momento sus acciones fueron encaminadas a favorecer a los españoles americanos, para granjearse su confianza. Sus esfuerzos se centraron fundamentalmente en las áreas de: salubridad pública, cultura y defensa.
A raíz de la invasión napoleónica y la ausencia del poder real, germinarán las ansias independentistas de los criollos. Cuando en 1810 estallaron las sublevaciones, que siempre intento evitar con una política de prevención y moderación, evitando el uso de la fuerza, de hecho, nunca ordenó ni firmó una ejecución sumaria. Definitivamente sus esfuerzos por impedirlo, no llegaron a buen término.
De Abascal reorganizó el Ejército, incrementando la oficialidad española, y convirtió el virreinato en el centro de la contrarrevolución. Ocupó el Alto Perú, cercenó las sublevaciones de Chile en 1814 y Quito, abortó las intentonas en el propio Perú y obstaculizó los avances de los rioplatenses hacia el norte. Incorporó además a su virreinato las provincias de Córdoba, Potosí, La Paz y Charcas, así como la capitanía y la Real Audiencia de Quito. Los nuevos conatos revolucionarios en Cuzco, Tacna y Arequipa, fueron igualmente reprimidos.
Esta eficaz represión a los movimientos de emancipación, no solo le granjeó enemigos entre los criollos del cabildo, sino en parte del alto clero que colaboraba en la insurrección y no es porque no se esforzara por mejorar la vida de sus administrados:
-A pesar de que era un realista convencido, trató de americanizar la administración colonial española con la fundación de un partido criollo y del llamado Regimiento de Voluntarios Distinguidos de la Concordia (de donde proviene su título de marqués), que integraban por igual criollos, mestizos e indígenas.
-Abolió la Inquisición en el virreinato.
-En cuanto a la capital del virreinato:
. Mejoró la limpieza y la seguridad.
. Construyó un extraordinario cementerio, considerado por la UNESCO uno de los más bellos de Hispanoamérica.
. Fundó el Colegio de Abogados del Perú.
. Creó el Colegio de Medicina y Cirugía de América y la Escuela de Pintura de Lima.
. Restauró el Colegio de Caciques y de Estudios Generales de Primeras Letras y Gramática Latina, que llegaron a tener más de cuatrocientos alumnos.
El escritor Ricardo Palma en el artículo publicado en “La Revista de Buenos Aires, historia americana, literatura y derecho” enero 1864, nos describe como fue el final de su virreinato.
“Algunos de sus enemigos sobornaron a la servidumbre del palacio para entrar en su despacho y depositaron tres saquitos con tres diferentes especies. Cuando el virrey llegó a su despacho. Abrió el primero que contenía una porción de sal, condimento perfecto para lo que encontró en el segundo saquito, estaba lleno de ricas habas, cuando abrió el tercero, que no contenía nada relacionado con la gastronomía, quedo pensativo durante largo rato, hasta que consiguió desvelar el mensaje.
……En unos días el Virrey, creyendo estar en peligro, pidió ser relevado de su puesto.
A todos pilló por sorpresa su decisión, hasta que se desveló lo que, el último saquito contenía.
Se despidió el 07 de julio de 1816, siendo relevado por el general Joaquín González de la Pezuela Griñán.
Dejando por escrito un resumen de sus actividades: “siendo el resultado de toda la tranquilidad en que entregué el territorio que me estaba confiado; conquistados a fuerza de armas los Reinos de Chile y Quito, éste en dos ocasiones y sujetas las cuatro Provincias más pobladas y pingües del virreinato de Buenos Aires; dejando en pie un Ejército de más de diez mil hombres aguerridos, disciplinados y provistos de todo lo necesario”.
Todo ello era aún más notable si se tiene en cuenta, de donde partió:
- Un lamentable estado económico del territorio. El virreinato era incapaz de abastecerse.
- Con un ejército inicial compuesto por: un solo regimiento veterano, El Real de Lima con mil cuatrocientos hombres y varios Cuerpos de Milicia compuesto por personal mayoritariamente locales, de bajo valor militar y de dudosa fidelidad
Su despedida fue un día de luto. Sus últimas palabras fueron premonitorias de los que había de venir "No quiero que el Perú se pierda para España entre mis manos: harto he hecho por atajar el torrente y es inútil luchar cuando el triunfo es imposible".
No se puede negar la veracidad de todo el relato, aunque parece que algo de su cosecha, aportó Ricardo Palma. Si bien es cierto que, el virrey solicitó el ser relevado. La causa final fue como consecuencia de algunos reveses sufridos mientras sofocaba la insurrección de independencia en Cuzco y Lima, y a la par, tenía que defender a Buenos Aires de los ataques de los ingleses. Fue destituido por Fernando VII el 14 de octubre de 1815, entregando el mando el 7 de julio de 1816.
Tras su llegada a España, El 16 de octubre se le otorgó el rango de Capitán General y fue nombrado miembro del Supremo Consejo y Cámara de Guerra. Falleció a la edad de 78 años, teniendo el privilegio de no habérsele realizado juicio de residencia (2), durante el periodo que desempeñó su cargo en el Perú.
A raíz de este mensaje enigmático y que el lector habrá resuelto. Nos plantearemos las dificultades que entraña desvelar muchos de los mensajes que recibimos, actualmente:
La primera es el gran número de mensajes que recibimos, especialmente a través de nuestro teléfono móvil. ¿Quién no recibe un centenar al día? Es necesario cribar los que creemos de interés y desechar el resto. ¡Que no es poco!
Segunda: No todo los que recibimos es cierto. Las noticias falsas o mensajes que buscan robar tus datos o infectar tu dispositivo, y que, a partir de la pandemia, se han disparado. En este grupo están los que buscan manipular políticamente, enviándonos informaciones falsa o medias verdades y los que nos quieren vaciar la cuenta corriente.
En los últimos años, potenciados sobre todo por la inteligencia artificial (IA), los contenidos falsos superan la capacidad de detectarlos. La consultora Gartner estableció hace tres años que, para 2022 la mitad de noticias que circularan por la red, serían falsas. Las nuevas tecnologías, parece, no nos van a ayudar, sino todo lo contrario.
En cuanto a las que nos quieren vaciar la cuenta, hay que decir que las entidades bancarias, especialmente a partir de que los juzgados les han forzado a abonar las cantidades detraídas de forma fraudulenta, han espabilado notablemente, aunque eso implique que, debemos seguir sus protocolos para acceder y operar en nuestras cuentas bancarias.
Por no hablar de los mensajes que nos quieren trasladar nuestros líderes nacionales. Hemos tenido una muestra con el cara a cara entre Sánchez y Feijóo.
Apunta Manuel Campo Vidal, experimentado moderador de debates, en su artículo publicado en el diario El Mercantil Valenciano “Levante” el 18 de julio: “El debate es un derecho de los ciudadanos que no en todos los países se consigue, al menos de forma estable. Una vez convocado, políticos, organizadores y periodistas moderadores deben garantizar que se produzca en condiciones aceptables para que sea inteligible y eficaz. De lo contrario solo refuerza la frustración”
Pues bien, ni fue inteligible ni eficaz. Desde el minuto uno, Sánchez no dejó exponer sus ideas a su oponente, creyó estar en el senado y en respuesta al desafío Feijóo, contrarresto en los mismos términos y los moderadores colaboraron en que así fuera. Los españoles recibimos mensajes sesgados que, posteriormente miembros del Gobierno, nos han comunicado que eran una sarta de mentiras. Lo que, si nos llegó con claridad, fueron los mensajes gestuales.
Y si añadimos los mensajes difundidos por los medios de comunicación dependientes y el famoso CIS. con sus predicciones con aciertos por debajo del 50% respecto a entidades y empresas que se dedican a sus mismos menesteres.
El ciudadano lo tiene realmente complicado, se encuentra en un verdadero laberinto informativo.
Si esto es a nivel individual, que vamos a decir a nivel de los Estados. Su responsabilidad y las consecuencias de sus decisiones son enormemente graves, sino no los detectan o son mal interpretados.
En Europa tenemos los últimos ejemplos: Poseyendo medios sofisticados y expertos para interpretan los mensajes. La Canciller Ángela Merkel, su gobierno y asesores no interpretaron los que difundía Putin. Ese error ha llevado a Alemania, el motor de Europa, a la recesión técnica, por su dependencia energética de Rusia. Y su caída, nos ha salpicado a todos.
De igual manera, los presidentes de la República Francesa no han tomado medidas adecuadas, cuando durante años, una parte importante de los inmigrantes lanzaba mensajes constantes del fracaso en las políticas de integración en la sociedad francesa. Y ahí están, pagando las consecuencias. Cuando veas las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar.
Como conclusión. Es cierto que tenemos más herramientas, para lograr descifrar los mensajes, que nuestro personaje, pero bastante más complicado lo tenemos y lo tendremos en el futuro, para lograr descubrir las certezas o falsedades que esconden esos mensajes y poder obrar en consecuencia y todo ello, sin tener en cuenta “los cambios de opinión”.
El voto del próximo 23 de julio, tendrá consecuencias en nuestras vidas, durante los próximos cuatro años. Una mayoría tiene decidido el voto hace meses, salvo que ocurra una catástrofe. ¡Dios no lo quiera!, pero hay 900.000 indecisos que tendrá que emitir el voto, basándose en los mensajes que reciban o jugándoselo a cara o cruz y serán decisorios. No quería estar en su situación.
NOTAS:
(1) Cargo político-militar designado por el monarca para supervisar los asuntos diversos de la ciudad, en ausencia del gobernador o el Capitán General
(2) Proceso de control administrativo cuyo objetivo era detectar que funcionarios públicos estaban realizando sus actividades de manera correcta, pues de lo contrario, quien fuera pillado actuando al margen de la ley, con despotismo, arbitrariedad o injusticia, sería ejemplarmente castigado, con sanciones que iban desde lo económico (reparación del daño) hasta ser desterrado a perpetuidad del territorio en el cual había ejercido su actividad, inhabilitándoles, además para volver a ocupar cargos públicos.
FUENTES:
-RAH José Fernando Abascal y Sousa
-El Virrey de los enigmas. José Manuel Estrada
-Cuando no había rey en España, Abascal lo era de América. Juan Ignacio Vargas.
-Portal de Archivos Españoles (PARES)
Imagen 1: Wikipedia
Ángel García Muñoz