Las mitologías progresistas
En las ideas de la sociedad postmoderna que circulan en los medios de comunicación, existen muchas afirmaciones que poco tienen que ver con la realidad, sino que son mitologías de significado progresista aceptadas sin ningún discernimiento crítico.
Contrariamente a lo que se supone, las mitologías no son exclusivas de las edades antiguas, sino que también las encontramos en tiempos modernos. Es muy cierto que la humanidad ha avanzado portentosamente en los conocimientos científicos y técnicos, pero la ignorancia y los prejuicios están a la orden del día en las cuestiones de carácter humano, como son la historia, la política, la ética o la religión, tal como se puede poner de relieve fácilmente en múltiples aspectos.
La primera y más extendida mitología moderna es la mitología del progreso de la humanidad, proclamada como si fuese algo tan claro como la ley de la evolución, pero que no es así. Este mito surge en el siglo XVIII en la filosofía de la Ilustración, uno de cuyos dogmas es que la humanidad, liberada de los oscurantismos medievales y guiada por la luz de la razón, alcanzaría la libertad y la felicidad soñadas. Se olvida que lo humano puede retroceder a extremos de inmensa barbarie, como lo demuestran los genocidios de millones de personas en las dos guerras mundiales, las tiranías asesinas del comunismo, los miles de abortos cometidos cada día, o la manipulación genética, entre otras gravísimas atrocidades.