Los desengañados por el PP

Hay un sector de otrora votantes del PP que se han alejado por la mala gestión de la corrupción política y por la debilidad o ausencia de valores morales que antes preconizaba, entre ellos el aborto.

Los votantes que ha ido perdiendo el PP se han ido a la abstención o a Ciudadanos, en este último caso por su insistencia en combatir la corrupción política, pero no los que preferirían un partido político que defendiera de verdad la vida y reformara el aborto en España, ahora totalmente libre tras la reforma de Zapatero, y también los que miran con asombro cómo se aprueban en diversas comunidades autónomas ley de ideología de género, como es el caso de Galicia donde el PP gobierna con mayoría absoluta o Extremadura.

Ley de elección de sexo

Las Cortes Valencianas están a punto de aprobar la “Ley integral del reconocimiento del derecho a la identidad y expresión de género”, es decir la que quiere imponer la ideología de género. Con ese título tan largo, o precisamente buscado con tal complejidad para que pase inadvertido ese texto legal en la sociedad, el mareo de cualquiera es comprensible. Los más entendidos la resumen en la ley de ideología de género, pero encuentran grandes dificultades para explicar la ideología de género. No digamos ya en el caso de la mayoría de los ciudadanos, que tienen otros problemas más urgentes –dificultades económicas y laborales, salud, educación de los hijos, atención de los mayores y discapacitados, por ejemplo– y, aunque tienen sobrada capacidad para entender tanto o más que los diputados, la cuestión sexual no es la prioritaria, pero en el caso del tripartito las prioridades son las que son. Ya llegará el momento de que los votantes juzguen en 2019 lo que ha sucedido estos años.

Antologia de Comèdies d'Antoni Ruiz Negre

Antología de ComediesA modo de pròlec.

Si sempre resulta complicat formular la crítica a una obra teatral, prou més difícil ho és, quan s’agrupen vàries d’elles en un mateix volum antològic.

En referir-nos a les qualitats d’un conjunt d’obres, potser donarà més clara llum al llector parlar de qui les ha escrit, o inclús prendre amprades autorisades paraules, de quins en motiu de publicacions anteriors, publicaren frases que el retraten encertadament.

Aixina s’atrevim a reproduir ací opinions alienes, que en son dia encapçalaren algunes publicacions lliteràries o dramàtiques, de l’autor d’esta Antologia de Comèdies.

La ideología de género

Después del fracaso histórico del marxismo, han surgido en occidente otras ideologías con pretensiones revolucionarias, no ya políticas, sino culturales y sociales, y una de ellas es la autodenominada ideología de género, muy aireada por los movimientos radicales feministas y del orgullo gay. No es sólo un movimiento reivindicativo, sino también una “ideología”, esto es, una filosofía sobre la persona humana, y concretamente en su condición sexual, que pretende subvertir desde sus mismas raíces; como todas las ideologías, es un sistema cerrado de ideas a semejanza de los credos, porque ha de admitirse en bloque, y no admite diálogo. Y es una ideología de “género”, una palabra que hay que entender en su significado gramatical de género masculino, femenino o neutro, porque abarca estas tres acepciones; aunque se presta a una cierta ambigüedad, la palabra está elegida con una intención bien precisa y calculada: cambiar las ideas que tenemos sobre la persona humana.

Contrastes (2ª parte)

A veces, muchos pensamos que retrocedemos en nuestra evolución con una Ley injusta de impuestos mal distribuidos, unas pensiones de nuestras viudas y pensionistas insuficientes. En la usurpación como padres de nuestros derechos en la educación de nuestros hijos y nietos al amparo de la Constitución, ¿dónde queda su artículo 27,3? con la intromisión ideológica y doctrinaria del partido en el Poder (Asignatura de Educación para la Ciudadanía de nuestros jóvenes). Con una Ley de Dependencia de nuestros ancianos, gaseosa y grandilocuente, carente durante años del necesario soporte económico para hacerla real y eficaz… En fin, nos da la sensación que el Estado con su parcial control, se infiltra en la sociedad e intenta manipular, con demasiada frecuencia, nuestras creencias y valores, nuestras costumbres y tradiciones. En resumen influir e inmiscuirse en nuestras vidas, en nuestros principios y conciencias.

Náufragos, robinsones y llorones en Internet

La aparición de internet, la irrupción incesante de las nuevas tecnologías de la información y la multiplicación de las redes sociales han propiciado un cambio cultural y económica gigantesco, y eso que todavía estamos en el comienzo.

Afecta al ámbito laboral, lo comprobamos en la imparable venta o gestión “on line” de casi todo tipo de productos o bienes –en los bancos los empleados están muy nerviosos, al observar la disminución de clientes físicos y la necesidad de readaptar plantillas, a titulo de ejemplo-, en los medios de comunicación que llevan tiempo intentarse adaptarse con desigual éxito, en el ámbito familiar, educativo, administrativo: nada queda ajeno prácticamente a la revolución digital.

Usar bien internet

Me ha alegrado la decisión de la Generalitat Valenciana de racionalizar el uso de internet entre los funcionarios. Se pueden y deben ahorrar unos cuantos millones de euros, que pagamos entre todos, de modo que los funcionarios y cargos de la Generalitat utilicen internet sólo para lo que es necesario para su trabajo, tanto en ordenadores como en dispositivos móviles. Tanto los funcionarios como cualquier ciudadano debemos reflexionar ante las facilidades que otorga internet, para el trabajo, pero también para la distracción, el entretenimiento o usos inadecuados para el fin que se ha contratado, en el caso de los funcionarios con el dinero de todos. Si un ciudadano utiliza convulsivamente internet –que los hay-, como se lo paga de su bolsillo, puede decidir en qué se lo gasta, pero no si es un gasto pagado con nuestros impuestos o la empresa.

Suscribirse a RSS del Club de opinión Jaime I y de estudios históricos