La actual infrafinanciación NO ES UN TEMA NUEVO

La equidad es una virtud de la justicia que impulsa a dar a cada uno lo que se merece o corresponde; es decir, recibir imparcialidad en un reparto o en el trato. Los distintos gobiernos centrales no parecen entenderlo así con los valencianos desde hace algunos años. El análisis de las balanzas fiscales y las insuficientes inversiones públicas en la Comunidad Valenciana así lo testimonian.

Las balanzas fiscales y numerosos informes reflejan que la Comunidad Valenciana es la peor financiada con relación al PIB y a su renta “per capita”. Urge corregir el sistema de financiación.

Un informe elaborado a finales de 2013 por la comisión de economía de los premios Jaime I, compuesta por los ilustres profesores Jaime Lamo de Espinosa, José Barea, Juan Velarte, Pedro Schwart y Ramón Tamames ya puso de manifiesto la discriminación económica que sufríamos los valencianos y proponían modificar el “statu quo” del vigente sistema de financiación.

Los valencianos somos unos impositores natos a la tesorería del Estado. La C.V. tiene un gran desfase entre lo que aportamos y lo que percibimos. Los informes de expertos reflejan que somos una Autonomía que tiene déficit fiscal y una renta por habitante inferior a la media de las Comunidades. La discriminación que sufre la Comunidad Valenciana es extrema, única, injusta, irracional y estructural. ¿Cómo es que financiamos los servicios de Comunidades más ricas que la nuestra?  El actual sistema de financiación autonómico nos penaliza.

En la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFP) convocada por el presidente del gobierno Pedro Sánchez el 28 de julio de 2021, otra vez, se han visto frustradas las reivindicaciones valencianas al no abordarse la inaplazable negociación de la reforma del sistema de financiación autonómico en el avance de los Presupuestos Generales del Estado para el año 2022. El Gobierno da la espalda al presidente valenciano Ximo Puig y a las peticiones valencianas sobre cuestiones candentes como son: la financiación, las infraestructuras y el apoyo al campo valenciano.

En septiembre de 2021, otra vez más, se ha puesto de manifiesto la falta de compromiso por parte de la vicepresidenta del gobierno de Pedro Sánchez y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, no fijando los plazos para la reforma de la financiación autonómica, enfriando la estrategia del presidente valenciano Ximo Puig para llevar el debate a la agenda nacional y dar largas a la cuestión de la financiación, provocando malestar en Valencia, aunque la reciente reunión con el Presidente de Andalucía ha favorecido la visibilidad del problema financiero. Ahora se puede plantear la posibilidad de aplicar una quita parcial de nuestra tradicional deuda para compensar a la C.V

Los gobiernos valencianos deben propiciar medidas económicas legales que favorezcan que nuestra Comunidad sea un polo de atracción de inversiones nacionales y extranjeras. Impulsar la creación de empresas en nuestro territorio que tengan un valor añadido, independientemente de la actividad turística que representa un porcentaje elevado de nuestro PIB. Potenciar ferias de muestras, la producción exportadora, el comercio y el cooperativismo. Apoyar y auspiciar la investigación productiva encaminada a registrar patentes y crear marcas comerciales de reconocido prestigio nacional e internacional. 

Nos preguntamos: ¿Por qué está paralizado o ralentizado el corredor mediterráneo? ¿Por qué no recibe el Puerto de Valencia las mismas inversiones que otros? ¿Por qué no se insta a llevar a cabo el trasvase del Ebro del agua sobrante y desperdiciada en el mar? ¿Por qué el Gobierno central no asigna más recursos para infraestructuras a la Comunidad Valenciana? ¿Por qué los valencianos estamos económicamente mal financiados en función de la población? ¿Por qué solo salimos en los telediarios para las malas noticias? Son algunos de los interrogantes que nos formulamos y que merecen una reflexión.

El motivo de la desafección y mala financiación valenciana está en la escasa consideración que los diferentes gobiernos nos han tenido y en nuestro limitado poder de influencia. Acabemos con la invisibilidad de la Comunidad Valenciana. Necesitamos un revulsivo social que nos despierte como pueblo y exijamos nuestras justas reivindicaciones tanto en Madrid como en Bruselas.

 

Lunes día 27, diario Las Provincias, p. 27
  • José Vicente Gómez Bayarri es Licenciado en Filosofía y Letras, Doctor en Historia, 
    Catedrático de Geografía e Historia, Académico de número de la RACV y Medalla de 
    Plata de la Ciudad de Valencia.