Copago sanitario
Según nos conviene, aludimos a cómo abordan los países de nuestro entorno ciertas materias. Y no digamos los partidos políticos. El copago sanitario es buen ejemplo.
Un amigo de Castellón ha pasado unas semanas de agosto en Estonia, en Tallin. Allí notó fuertes dolores en la espalda. Decidió ir a un Centro de Salud. Pidió cita y, al entrar, le pidieron que abonara 5 euros por la consulta. Le atendió una médico en un más que correcto inglés, con calma. Este amigo comprobó que allí funciona bien la atención médica. Le llamó la atención el cobro inicial de 5 euros, que le pareció bien.
Al hilo de esta conversación, me vienen imágenes de bares y terrazas a rebosar, lo cual me parece estupendo y comparto a gusto, sobre todo en agosto. Pero no me parece excesivo pagar 5 euros porque un médico me atienda, que es el precio de dos cervezas.