La dimisión de Mazón tendría que haberse producido antes. El retraso en hacerlo ha favorecido a Pedro Sánchez, para tapar su gran responsabilidad en la DANA, la del Gobierno central y agencias como AEMET y la CHJ: ahí sigue Miguel Polo.
Feijóo habló el lunes de que Mazón ha sido sometido a una “cacería” política. Santiago Abascal, hace unos días, calificó como “chivo expiatorio” a Carlos Mazón, y por eso el líder de Vox no asistió al funeral de Estado el pasado miércoles en Valencia.
El 3 de noviembre de 2024, en Paiporta, los vecinos se pronunciaron y queda para el recuerdo la escapada de Pedro Sánchez. Un baño de barro y de realidad para Sánchez y Mazón: al menos, el entonces president de la Generalitat no huyó.
Huele a podrido el nivel de los que gobiernan España en estos momentos. Mazón ha dimitido, pero no debería ser el único, ni tal vez el principal señalado. Las bajezas de Sánchez con motivo de la DANA y la reconstrucción son muchas, hasta crueles.