Opinión

"la" covid i "la" Ebola

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La pandemia d’este novedos coronavirus nos deixa sorpreses no nomes sanitaries, economiques i socials sino tambe idiomatiques. Al principi era general “el covid” (mes ‘natural’), pero a les dos o tres semanes començaren a apareixer en castella uns rars “la covid”, i tambe en valencià, “Portal informatiu sobre la COVID 19 a València” (anunci de l’Ajuntament de València, Lev-EMV, 5-4-2020: 25).

El principal motiu dels canvis es l’opinio de la Fundéu (RAE).

Misterios en Residencias

Saber con exactitud cuántos ancianos han fallecido en residencias a causa del coronavirus es casi imposible: de ello se encargan las conselleras Ana Barceló y Mónica Oltra. Se dice en los medios de comunicación, citando fuentes sindicales o “estimaciones”, que han fallecido más de 100, la mitad del total de fallecidos por Covid-19 en Castellón (221). Fiscalía está investigando seis residencias: Morella, Virgen de Gracia en Vila-real, Villahermosa, Montán y 2 en Castellón. Sólo entre la de Morella y la de Vila-real, unos 74 fallecidos, pero ya digo, estimaciones, cálculos o datos que nos llegan a los periodistas no por los cauces oficiales, sino por otras vías, porque se quieren esconder los datos reales. Primer misterio, los fallecidos realmente por coronavirus en cada residencia de la provincia, que hasta los sindicatos denuncian que se les ocultan datos. Según parece, ha habido 500 contagiados por el virus en las residencias, entre residentes y trabajadores.

Cuatro agujeros del Ingreso Mínimo Vital

Me alegra que se haya aprobado en España el Ingreso Mínimo Vital (IMV), que ya debía haberse aprobado hace años, y que existe en los países de nuestro entorno. Ahora es más necesario a causa de la grave crisis ocasionada por la pandemia.

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José-Luis Escrivá, ha afirmado que, al regularlo, se han tenido en cuenta “los mejores esquemas europeos”. Pero el IMV tiene algunos agujeros.

El primer agujero es que ha agitado con razón a los ya penalizados pensionistas españoles, que han puesto el grito en el cielo, al excluir a los mayores de 65 años, dejando fuera a los que cobran pensiones de jubilación no contributivas inferiores a 462 euros, que es el mínimo que otorga el IMV, con un máximo de 1.015 euros.

Ministro Planas: póngase las pilas

El Ministro Planas en una entrevista para el periódico Mediterráneo, el pasado 27 de mayo, ofendía a los citricultores con estas palabras: “El sector citrícola no debería echar la culpa a Sudáfrica sino ponerse las pilas”

En sus políticas y declaraciones, el Ministro Planas demuestra que, en lugar de defender a los agricultores, traicionándolos, está defendiendo los intereses de unos pocos poderes económicos que producen en esos países con los que la UE ha firmado: Acuerdos de Libre Comercio, y que son los que amenazan con sustituir a la agricultura española.

En respuesta a esa ofensa, yo mismo, como presidente de ALIV, divulgué un video condenando esta actitud globalista del ministro y advirtiéndole de que se la vamos a liar si no es él el que se pone las pilas.

Castellón pasa hambre

Las consecuencias de la crisis sanitaria a causa de la epidemia son múltiples y dolorosas. La más grave, sin lugar a dudas, la pérdida de vidas humanas, sobre todo en residencias de mayores, cuyas causas duelen todavía más, porque no se actuó en algunas a tiempo y con los medios adecuados, pese a que era evidente que era el sector más vulnerable: si en algunas no ha habido contagios ni muertes no parece que se deba a la casualidad, sino a haber puesto los medios a tiempo. La sociedad, los familiares de los fallecidos, no deben pasar página, y es algo que se resolverá en los tribunales o a través de los cauces que cada uno quiera utilizar, en memoria y en honor de los fallecidos. Negligencias laborales o sanitarias, tardanzas reiteradas por parte de las autoridades, deben ser aclaradas, también para que no vuelvan a suceder, si hay nuevas emergencias en el futuro, sean del Covid-19 o de otro tipo. Nuestros mayores tienen derecho, se lo merecen, y las heridas de lo que ha pasado deben restañarse con rigor para no recaer en reincidencias.

Para desprenderme del lastre del pancatalanismo

Anhelo cruzar, junto a mis amigos y compañeros de inquietudes, el mar Rojo para desprenderme del lastre del pancatalanismo.

En los momentos de máxima angustia espiritual del pueblo de Israel, cuando su reino había sido devastado y el templo de Yahvé derribado y profanado, se purificó la manera de entender lo divino y volvieron a recuperar su identidad como pueblo de Dios. El paso del mar Rojo fue su punto de inflexión.

Hoy quiero mostrar que el Valencià tiene que cruzar su mar Rojo para purificarse del pancatalanismo que los poderosos políticos han ido llenando sus alforjas de normas y vocablos ajenos a su ser, hay que volver a saborear las palabras de Cervantes cuando se refería al Valencià: “graciosa, dulce y agradable”

Botiga "Sorpreses Lacreu"

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Soc fidel ‘seguidor’ (follower, per als mes anglicans o anglofils) de l’arqueollingüistica que el ‘filolec’ Josep Lacreu nos regala, com el manà, que era flor d’un dia. Ho saben aquells que tenen la paciencia de llegir els articuls que publique en esta uep.

Com en estos dies de pandemia penitent hi ha poques coses que fer i he de passar les hores, me fixe un poc mes en el diari i baixe regularment a la tenda “Sorpreses Lacreu”.

A finals de març (Levante-EMV, 26-3-2020: 55), a conte del coronavirus comentava el terme “masquereta” que es un diminutiu de “màsquera”. Ell apunta que nos sorprendrem que davant de e s’escriga ‘que’... pero no, tambe passa en ‘esquena’, ‘quefer’, ‘requerir’, ‘taques’, ‘vaques’... ¿volia dir que nos sorprendria que no fora ‘mascareta’ la paraula?

Marlaska, 'clon' de Sánchez

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, cesó fulminantemente al coronel de la Guardia Civil Pérez de los Cobos, en teoría por “pérdida de confianza”, y en la práctica por no informarle del informe sobre el 8-M, que la juez del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid había solicitado, y del que no salen bien parados Fernando Simón ni el ministro Salvador Illa. Poco después dimitió el general de la Guardia Civil Laurentino Ceña, y habrá que ver si hay otras dimisiones en solidaridad con Pérez de los Cobos.

Con tres llamadas telefónicas, Marlaska ya tuvo claro que había que cesarle, por indicación del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, más que interesado en que se diluya todo lo referente al 8-M. Allí estuvieron y alentaron previamente la esposa de Pedro Sánchez, Carmen Calvo, Nadia Calviño, Isabel Celaá, el propio Fernando Grande-Marlaska y todos cuantos sabemos.

Colectas en iglesias

El pasado lunes, 18 de mayo, Fernando Giménez Barriocanal, vicesecretario para Asuntos Económicos de la Conferencia Episcopal Española, pidió en rueda de prensa a los católicos que fueran generosos en sus donativos, para pagar el sueldo del cura y las instalaciones, ya que “la Iglesia no vive del aire”. Al estar los templos cerrados por el Estado de Alarma, no ha habido colectas. Fernando Giménez sugirió, también, fórmulas para efectuar donativos que comprometan más que donar esporádicamente, como aportaciones periódicas, al igual que se está suscrito a plataformas de televisión o música. La pandemia ha provocado, entre otras cosas, casi una total ausencia de donativos, y fue un “toque” realista, muy oportuno, en la línea de que los católicos se comprometan más a sufragar los gastos de las iglesias.

Pablo Iglesias calla

Pablo Iglesias, vicepresidente del Gobierno de Derechos Sociales, está muy callado respecto a los fallecimientos de ancianos en residencias. Han fallecido por coronavirus 18.400 ancianos en residencias, públicas y privadas, que supone que dos de cada tres fallecidos –27.650- por el Covid-19 son ancianos en residencias. Es una tragedia sin ningún tipo de paliativos, que nos tiene a todos los españoles indignados, dolidos. No es para menos.

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