El Cotonet de Sudáfrica: ¿MIENTE LA ADMINISTRACIÓN?
El requisito indispensable para mentir es la voluntad de engañar, y esa voluntad sólo la puede conocer quien ha dicho la falsedad. No obstante, si existe buena voluntad, si no ha existido intencionalidad de engaño, una vez descubierto el error, del mismo modo que éste se hizo público, el desmentido también debe hacerse público.
El fracaso del Plan de Acción del gobierno es un hecho que hoy todo el mundo reconoce. Un Plan en el que, a excepción de las asociaciones de agricultores de Villarreal y Nules, increíblemente, todos aceptaban como bueno y todos defendían, pero que hoy, a la vista de los daños, todos critican airadamente el fallido Plan y nadie se acuerda de haberlo defendido. El razonamiento de estas asociaciones era muy simple: si el Plan no incluía nada nuevo a lo utilizado la campaña anterior, en la que hubo daños importantes, por qué regla de tres, ahora, tenía que funcionar.
De modo muy resumido, recordemos que el Plan se basaba en: