El fundamentalismo laico
En estos últimos años, la Iglesia Católica viene padeciendo en nuestro país una enconada beligerancia por parte de políticos partidistas y de ciertos poderes fácticos de la comunicación, a la que no es posible encontrar otra explicación, que la de la agresividad de los fanáticos. Tanta es la obsesión por hacer triunfar los principios laicistas y tanta la fobia contra todo lo que huela a católico, que se puede hablar de un verdadero “fundamentalismo laico”, por más que este término sea una contradicción en sí mismo e indique el sectarismo de los que se proclaman antisectarios. Los extremos se tocan, y si estamos sufriendo en ciertos países islámicos una intransigencia temible a causa de la religión, también estamos asistiendo en ciertos países democráticos, como es el caso de España, a una intransigencia en contra la religión, pero de la religión católica exclusivamente, por supuesto.