La política, UN OFICIO DE RIESGO
Debemos asumir que la mayor parte de los políticos han accedido a esta noble tarea movidos por el deseo de defender sus ideales y ayudar a que la sociedad se vea bien atendida y su municipio, su región y su país avancen por el camino del progreso.
Hay que tener un carácter muy especial para aproximarse a esta actividad que todas las encuestas sociológicas consideran como la menos prestigiada de entre todas las profesiones posibles y en la que cada mañana hay que estar preparado para tragarse un sapo.
Sin duda es la forma de comportarse de quienes se han acercado a la política con el único propósito de medrar y han aplicado prácticas poco ejemplares para lograrlo, los responsables del desprestigio de la profesión.