Apadrinar a afectados por la DANA
Es tal la descoordinación y enfrentamiento que ha habido –y hay, por desgracia- entre los políticos por ayudar a los casi un millón de personas afectadas por la DANA en Valencia, que si algo se está demostrando es que funciona la sociedad, funcionan las personas, no las estructuras ni los cálculos del Gobierno o de la Generalitat Valenciana.
Hasta hace dos días, una persona decía que lo único que le había llegado eran las ayudas de los voluntarios y la ayuda generosa de Juan Roig, presidente de Mercadona, para sus 1.000 trabajadores damnificados.
Como si fuera un mastodonte, pese a los miles de funcionarios y miles de millones, quienes primero llegaron a ayudar fueron los voluntarios: no ha de olvidarse esto. Ni siquiera hubo policía para evitar los más que previsibles saqueos y asaltos nocturnos a viviendas para terror de las familias.