Asustar a los periodistas
Pedro Sánchez pretende asustarnos a los periodistas. Es el mayor síntoma de espíritu totalitario y de debilidad por su parte.Intentar atemorizar a una profesión tan castigada y curtida es tarea vana.
Además, si un Gobierno está deslegitimado para pedir transparencia, es el actual: ruedas de prensa sin preguntas, o admitiendo preguntas solo a algunos de algunos medios.
Las 31 medidas que ha anunciado en su Plan de Acción por la Democracia, que incluye reformar el Código Penal, las leyes orgánicas del honor y de rectificación, transparencia en la propiedad de los medios así como publicidad institucional, son la venganza por los ataques a Begoña Gómez, su esposa, y la falta de transparencia que caracteriza a este Gobierno.
Entre los colegas, varían las opiniones ante este plan de Sánchez. Se rechaza, por supuesto, porque es recortar la libertad de expresión, con apariencia de querer modernizar la legislación, y se habla de “Gobierno abierto”, como en un ramalazo de autocrítica.