Una dosis de serenidad política
Soy de los que piensan que la política española ha tomado un rumbo preocupante con la investidura de Pedro Sánchez y los posicionamientos de los diversos partidos políticos. Y de los que piensan que hubiera sido mejor ir a unas terceras elecciones que tener el Gobierno que vamos a tener. Pero no hay que perder la calma y, si existiera, creo que habría que administrar una dosis de serenidad para administrársela a algunos, a bastantes.
Es cierto que los votos a favor de Sánchez representan a 10,9 millones de electores, y los diputados que han votado “no” representan a 11,3 millones de votantes. Pero mientras tengamos el sistema electoral que tenemos, es el riesgo: la mayoría de los españoles no querían este Gobierno, y lo tenemos.
El resultado en la investidura es un jeroglífico o sopa de letras: 8 partidos apoyando a Sánchez –mejor dicho, siete partidos y la agrupación electoral Teruel Existe-, 8 en contra y 2 abstenciones.