La dictadura catalanista
1.- Hechos reales como la vida misma. La ley reconocía a los padres el derecho natural de elegir el tipo de enseñanza para sus hijos -en castellano o en valenciano- . Bastaba con manifestarlo en los boletines de preinscripción de los colegios. Hecha la ley hecha la trampa. Las normas no se colocaban en la cartelera de avisos de aquel centro escolar hasta después de iniciadas las vacaciones de verano. Según las bases, el padre que no pedía la línea en castellano automáticamente el hijo quedaba matriculado en la línea del valenciano. Es un hecho real que sucedía en un colegio de Castellón, controlado herméticamente por una minoría fanática de profesores nacionalistas.

Los profundos cambios que está experimentando nuestra sociedad se extienden a todos los ámbitos, y uno de ellos es el de la infancia. Los niños de hoy son, por supuesto, muy distintos a los de antes porque el contexto social y cultural es también muy distinto; pero de lo que no nos damos cuenta es de algo mucho más grave: en nuestra sociedad, el concepto y realidad de la infancia está desapareciendo. Por más que su edad nos diga lo contrario, los niños de nuestra sociedad ya no son niños, porque su forma de comportarse no se corresponde al estereotipo de la infancia que siempre hemos conocido. Lo propio de la infancia, su principal signo de identidad, es la inocencia, y es esto precisamente lo que está desapareciendo del alma de nuestros niños. El sociólogo americano N.