El necesario descanso
Agosto es el mes de las vacaciones por excelencia, y lo comprobamos pese a las circunstancias de la pandemia y las limitaciones que tenemos en nuestra vida cotidiana. En cualquier caso, este año hemos vivido y vivimos una situación de tensión y sufrimiento que hace más necesario el descanso para todos. El cansancio físico o psíquico hace mella en toda persona, no somos robots ni superhombres, y el descanso razonable y posible es una necesidad, un derecho. Algún lector puede sonreír con ironía al leer estas líneas, por encontrarse sin trabajo desde hace meses, o por una situación familiar agobiante. Desde luego, quien no ha podido abrir su comercio o reanudar su trabajo y sufre en su bolsillo puede estar tentado de no seguir leyendo cuanto escribo, pero me atrevo a decir que son quienes más han de hacer un esfuerzo para descansar lo posible: no se trata de ser pesimista u optimista, sino realista.